Un año más, la típica fiesta americana, con orígenes en la cultura celta, según algunos historiadores, tuvo su celebración en nuestra localidad de Ucar.
La noche del pasado lunes día 31 de octubre, y al grito de trato o truco, alrededor de una treintena de niños de nuestro pueblo, en compañía de sus padres y familiares, y disfrazados elegantemente, recorrían las calles de la localidad llenando sus bolsos de dulces y caramelos. Varias casas fueron adornadas con motivos terroríficos presididos por brujas, demonios, arañas y un largo etcétera de referencias a esta fiesta de los muertos vivientes.
Y a partir de la nueve de la noche todos los asistentes celebraron una cena en los locales del Bar El Círculo amenizada con música hasta la medianoche.
En este reportaje fotográfico podemos ver algunas de las casas decoradas y el excelente trabajo realizado (especialmente por Pily Huarte) para que los disfrazados luciesen esa elegancia macabra.
